10 de diciembre de 2011

Immigrant song



Necesito una tormenta azul, brumosa, terrible,
una fría noche de diciembre
que calle lo que mi boca grita cada vez que te suspiro.
Mis sábanas me enroscan, me sofocan,
mis brazos me envuelven en sueños, queriendo ser tú,
ignoro si desean mi terminación,
o solo elevan mi exhaltación... sueño húmedo embebido
en lágrimas cantantes...
mis monitores hacen sonar algun track de la escuela Reznor,
el ambiente es subjetivo, idílico, enamoradizo,
mis labios te buscan tras cada bocanada de aire,
mis ojos te buscan en cada espejo, esperando encontrarte
a mis espaldas, con tus hermosas manos
esperando el momento oportuno... para clavarse en mi carne
y despertar esas cantidades industriales de hedonismo.
Necesito un oscuro rincón de tierra virgen
donde las opiniones incorrectas son verdades irrefutables,
donde tu figura perfecta sea mi fuente de sonrisas,
y tus palabras tiernas sangren mi pecho,
y podremos beber del cáliz eterno,
que para unos sabe a amor, para otros, a destierro,
pero siempre mostrándonos escenas del multiverso,
aquellas donde el mal es, incluso, un bonito sueño.
Necesito un rincón donde sentir alucinaciones,
pues el iris de tus ojos me persigue como tales,
y sólo en el silencio se disfrutan tanto los males,
aunque no seas uno de ellos...
pero como a ellos he de gozarte.


9 de noviembre de 2011

blackdressing



Piel de sombras,
seda negra
perfumada de feromonas,
viste mi alma,
te lo imploro,
vísteme con tu transtorno
obsesivo, compulsivo,
deseoso de ser amada,
asfixiarme, ser perversa,
piel de sombras,
seda negra,
con jirones de belleza
portan tus ojos algo de vida,
entre mis manos
se desmorona
se vuelve líquida y poderosa,
miel eterna, no hay pureza,
solo sabores y penumbra,
piel de sombras,
seda negra,
torbellinos en tus piernas,
persiguiendo sin clemencia
a esta pobre alma en pena,
cuerpo inerte, ardiente alma,
deseoso de apaciguarla,
cabalgando mares densos,
se aman mi tráquea y tu brazo,
brazo de trapo, brazo oscuro,
piel de sombras, seda negra
que acarician mi yugular
al tiempo que rasgan mi espalda,
esa muerte que tanto anhelo,
el volver a la vida en sueños,
el amarte, quizas en secreto,
el ser tu guardian eterno,
y tú, mi tesoro incierto,
toda la riqueza que deseo,
piel de sombras,
seda negra...


7 de noviembre de 2011

Aero



Volar, dicen los hombres, es propio de las aves,
y de los seres que piensan.
Volar, dicen, es desprender los pies del cielo,
elevar la mente sobre la conciencia,
sentir que existe un todo más allá del todo...

Volar no es mas que un sueño.
Volar es propio de los impacientes
que desean encontrar en el viento
aquello que no encuentran en tierra firme,
Volar es alcanzar estrellas teñidas en ardor,
quemar la piel en ella, cual carne al fogón.
Ser carne de estrellas, comida de estrellas,
degustado por estrellas, consumido por ellas.
Demonios alados persiguen el viaje,
esperando a que algun incauto caiga,
para trasladarlo a la penumbra,
donde las alas son sólo jirones de papel...

Volar es propio de los soñadores,
aquellos que no desean ver dolor en el mundo,
aquellos que quisieran dormir volando,
entre sábanas de lluvia y almohadas de nubes,
volar es de los habitantes del reino de Oneiros,
que hacen el amor con las musas celestiales,
mientras Apolo revoluciona la lira
creando música de eterno descanso,
mientras los pies se regocijan con algodones,
con vino y con estelas de vientos alegres.

Pero volar no es mas que el eterno descender...
El mundo entero vuela, pues el mundo entero cae,
pecadores ardiendo al roce del viento con sus pieles,
sollozando de euforia, enmascarada de dolor,
lágrimas brotando e hirviendo, muriendo al nacer,
un enorme abismo, tan sublime
como el existir, como el vivir al límite.
Volar no es ir al cielo, ni estancarse en el infierno,
es reclamar las sensaciones de la olas en la cara,
exhaltar la adrenalina ante tremenda hazaña,
matar de dolor al alma tanto que en placer renazca,
Volar no es ascender, es precipitarse, ir en picada.
No es extenderse, es agudizarse, afinar el espíritu
y embestir una dimensión física
que puede reclamar la vida.
Volar no es ser libre, no es llorar de alegría,
es el vivir mismo, forjar la aerodinámica de la existencia,
pasar por el infierno mismo antes de librarse de él,
congelar el alma, y sentir por siempre,
temer por siempre,
amar por siempre...

Quiero volar,
y quiero que vueles conmigo.



25 de octubre de 2011

1878



Hace ciento treinta y tres años que sentía tu abrazo.
Ciento treinta y tres de vagar en este mundo tan... humano,
un mundo que me rechazó,
un mundo al que yo pertenecí...

Aún recuerdo cuando tendían la primera telefónica
que partía del castillo de Chapultepec.
Tantos héroes que nacieron de ahí,
hechos para defender nuestra patria,
y ahora el general Díaz quería usar para la guerra
el pilar intrínseco del hombre: la comunicación.
Y ahí estabas, soberbia, pero con esa hermosa
mirada púrpura, sobrenatural...
Fue ayer cuando yo vagaba entre las haciendas,
pidiendo trabajo a cambio de comida,
yo que alguna vez fui un periodista destacado,
víctima de la censura terrible del porfiriato,
y tu, entre los maizales, erguida cual guerrera,
limpiando tus labios de aquello que creía sangre...

Me llevaste a tus aposentos, a tu preciosa sala
adornada de sugerentes maquetas de la era industrial inglesa,
me sugeriste ese precioso habano, para posarlo en mi boca,
y en medio de la humareda, contemplaste mi rostro,
me describiste aquella asombrosa máquina de vapor,
autónoma, que prometía velocidades de 50 kilómetros por hora
para un coche de producción masiva.
Me mostraste un sistema experimental
que podía llevar múltiples conversaciones
en tan solo un par de cobre, en una sola línea telefónica...

Me mostraste tu habitación, con tus copias originales
de Tolouse-Lautrec, de Seurat, de Gauguin,
un borrador del actual Fatata te miti,
tan bizarro como hermoso ante mis ojos...
Me mostraste la espesura de tu cabellera
al quitarte ese molesto intento de cofia...
me mostraste que mi cuerpo, famélico y endeble,
aún era lo suficientemente fuerte para amar,
me mostraste que tu desnudez no es una obra de arte,
que tu carne no es cálida por que estuvieras realmente viva,
que tu piel tornasol es deliciosa al contacto de la noche...
y ese cálido ocaso de septiembre
me tomaste entre tus brazos, te convertiste en mi dueña,
me ordenaste que bebiera de tu cuerpo,
de tu piel, de tus labios, de tu miel, de tu sangre,
al tiempo que tu hacías lo mismo conmigo,
y así lo hice...
y mientras yo te amaba, tu me matabas,
y mientras yo enloquecía, tu me mirabas,
y mientras yo perecía... te regocijabas...
y la oscuridad se convertía en bebida,
y nos embriagábamos sin cesar...

Y esa noche, al hablar pestes de nuestro dictador,
al discutir de las nuevas tendencias de arte,
al cantar bajo las estrellas cánticos paganos,
descubrí la terrible hambre que contagiaste en mi ser...

Cuando amaneció, al siguiente dia, me encontraba en la cárcel.
Decían que devoré ferozmente siete cabezas de ganado,
que hice incisiones en sus yugulares, y que casi devoro sus fluídos...
y yo podía percibir tu aroma,
a mujer, a demonio, a vampiro,
alejándose para siempre de estas tierras corruptas.

Te lloré, sufrí de hambre, sufrí de hastío, tuve mi inicio duro
como todos los de mi especie.
Y ahora, que soy respetado, que soy poderoso,
extraño mi vieja profesión humana,
ser un periodista virtuoso
y ser vetado por ello,
porque como todo ser eterno,
a veces es bueno sentir el desprecio en carne
de alguien que no sea uno mismo.

16 de octubre de 2011

Pensar sobre pensar


Quiero pensar que sé lo que estás pensando.
Quiero pensar que odias que piense que sé lo que piensas.
Yo también he pensado cosas así.
Yo también he pensado cosas así, sobre tí.
Yo también he pensado que este mundo no vale la pena.
Yo también he pensado que la bondad del alma es recompensada con un mal rostro.
Yo también he pensado que dar las gracias es sólo valioso de palabra, pero no de acto.
Yo también he pensado a veces que tu amor no vale gran cosa para mí.
Yo también he pensado que sonreir no me resolverá ni la vida ni mi destino.
Yo también he pensado en abandonarlo todo.
Yo tambien he pensado en resignarme a esta vida que no me complace.
Yo también he pensado en que debería dejarme llevar por las circunstancias.
Yo también he pensado en que los frenos morales no siempre son los adecuados para alcanzar la paz.
Yo también he pensado en que la paz es sólo una palabra.
Yo también he pensado en que la perfección existe, aún cuando no la he palpado.
Yo también he pensado en que los cuentos de hadas existen, y que puedo vivir en uno de ellos.
Yo también he pensado que mi vida no vale nada, ni para mí, ni para otros.
Yo también, a veces, mojo mi almohada por las noches, deseando no volver a llorar jamás...
¿Y que mas da si algo de esto es remotamente cierto?
¿Porque terminar, cuando puedes volver a comenzar?
¿Para qué terminar algo que no ha siquiera empezado?
Pero en el momento en que decidiste tomar mi mano
supuse que querías que te acompañara en tus andanzas.
Quiero pensar... que valgo algo para tí,
al igual que tu vales demasiado para mí. 
Y que todo lo demás son circunstancias.

9 de octubre de 2011

Vestigios piratas




Media noche, el barco ha llegado.
Espero que hayas traído tu abrigo de lana.
En cuanto arribe a puerto, presentaremos papeles
y subiremos a nuestro camarote.
Será un largo viaje, dicen, debido a las aguas densas...
no digas a nadie que a un mes de partir
me sumergiré en el océano atlántico,
y buscaré tesoros británicos
restos de ataques piratas...
y ese extraño anillo que te dará inmortalidad.
No olvides tomar la llave del cuarto
donde guardan el equipo de buceo.
Yo me encargaré del resto.

Sube más tu sombrero, no sea que piensen los guardias
que intentas ocultar tu rostro, o que eres una ladrona.
No, eso es para mí.
Deja que me descubran. Guardaré el anillo en mi boca.
Cuando me descubran, me golpearán, y me exigirán
decir la verdad.
Pero no les dire nada hasta verte, amada mía,
y te entregaré el anillo, para que lo uses.
Sólo no olvides portarlo
hasta llegar a tierra firme, donde no puedan mirarte
ni intentar robártelo.
Prometeme, en este puerto lleno de niebla,
en esta cruda noche de octubre,
que te olvidarás de este horrible cáncer
que ha mermado tus preciados dias.
Prométeme que llegando a la India
me olvidarás, que no te preocuparás
por lo que me pudiera pasar.
Tendrán que liberarme tarde o temprano, te lo garantizo.
Y cuando yo sea libre
me dedicaré a contemplar tu arte,
y a mirar las estrellas intentando dibujar en ellas
tu rostro, que hoy es pálido y débil,
y pronto será lozano y colorido,
como esas hermosas pinturas
que nacieron de tu alma, mientras compartías
tu vida conmigo...
y cuando sea el momento, cuando estés curada,
te quitarás el anillo,
y lo volverás a arrojar al mar,
justo donde lo encontramos,
para darle vida a un soñador más,
y así permitir que cumpla su objetivo,
y que deje su huella en el mundo.

1 de octubre de 2011

Termíname



No vivo más, no en mi carne,
no en la lágrima de sabor añejo,
no en la densidad de esta niebla tierna
que alguna vez en mis mejillas se divirtió.
No, hoy no queda más calor bajo esta carne
que alguna vez ardió como hierro forjado,
en la que la pasión alguna vez posó.

En tus alas de muerte
encontré un exquisito alivio,
al fin pude cerrar los ojos
y mirar más allá del infinito.

Te entrego mis despojos, mi ser entero, 
mi única posesión que pudiera valer algo, 
renacen tus plumas de exquisito tacto,
renace el fulgor de tus ojos pardos, 
dame la vida al ser devorado
por el encanto de tus labios tiernos, 
que es mi anhelo por tí ser bebido,
y perecer tranquilo en tu regazo.

En tus alas de muerte
encontré un exquisito alivio,
al fin pude cerrar los ojos
y mirar más allá del infinito...

3 de septiembre de 2011

The flesh of a fallen angel






Quiero comerte la carne  debajo de tu carne.

Siento tanto deseo de embriagarme del aroma de tu cuello, contaminar mi perfume con el tuyo, sentir que me consumes poco a poco, al tiempo que yo me alimento de tu belleza, un intercambio de energías tan delicioso, tan seductor… tan erótico… tan saludable… tan tierno, que no hay lugar a la tregua.

Tengo tantos deseos de borrar todo dolor de tu espalda, absorberlos con mis labios, sentir cómo empiezan a arder mientras tu piel se hace más adictiva, más tersa… sentir tus delicados senos con mi mano derecha, mientras la izquierda se dedica a bailar por tu vientre, tus caderas, tu pierna y luego tu entrepierna, recorriendo ese delicioso camino una y otra vez, al revés y al derecho, sin que encuentres un momento de tranquilidad… deseo que sientas éxtasis, la sensualidad que sólo una mujer puede conocer en sí misma, usando mis manos como un instrumento… 

Quiero comer al unísono los labios de tu vagina y de tu boca, comparar ambos elíxires, deleitarme de ellos, beber sin cesar… beber sin parar… como si no hubiera otra cosa en el mundo que saciara mi sed, porque la única sed que tengo es de ti… quiero decidirme por sólo uno de esos brebajes, sólo uno, pues moriré eternamente en tus brazos si bebo un solo instante más de ambos… mi corazón estalla, tan sólo desea más… mis ojos buscan los tuyos, pero mi lengua busca tu calor más íntimo…

Quiero penetrarte, suavemente, sin desespero, no hay nada de que desesperarse… quiero sentirme dentro de ti, que me sientas dentro de ti, aguantando la respiración con sutileza… quiero sentir tus manos amoldando sus uñas y sus yemas en mi pecho y en mi espalda, preparándose para desgarrar toda la carne que puedan tomar de mí… quiero que no te preocupes en lastimarme, quiero que desesperes y enloquezcas cuanto sea necesario esta noche…

… porque esta noche soy solo tuyo, soy tu objeto de deseo, soy tu sumiso, quiero que me tomes, me humilles bajo el poderío de tu cuerpo, mientras mis ojos empiecen a revelar disgusto y sentimiento de revolución, y los tuyos, tan marrones y tan tiernos, me ordenan que siga, que obedezca, que me entregue… que coma de tí cada vez que tu comas de mí…


28 de agosto de 2011

Alimenta



Siento, absorto, la maldad oculta en tu ser.
Siento lujuria que enajena mis sentidos mortales,
que eleva mi raciocinio a niveles inimaginables.
Fuerza sobrehumana, percepciones dispersas,
la gotadora esencia de tu transpiración,
tan sucia, tan suave, tan femenina, 
el lenguaje de tus ojos al tocar mi espiritu, 
nuestras respiraciones entretejiéndose
en este telar, tu pintas el rojo y el dorado,
y yo el blanco y el negro,
la tela de el erótico vestido que viste esta noche, 
el whiskey acariciando nuestros labios, 
mi nariz fría descifrando tu espalda, 
se niega a bajar tan rápido, 
me niego a apresurar el saborearte, 
pues tan sólo bastarían tres eternidades... 
mientras tu voz mágica me cuenta en susurros
los secretos que no serán jamás descifrados.
No mires mis ojos con tu alma de dulzura, 
o me llevarás tan alto, tan alto,
que tendré que llevarte conmigo
donde el dolor no es más un pretexto. 



Para N.L. 

14 de agosto de 2011

Lágrima diamante



Hoy, la luna está retrasada.
Tiene miedo a ser tan blanca.
Tiene miedo a que los hombres lobo
se inspiren en su figura.
Quiere ser, por siempre, nueva,
que las olas sean pacíficas,
al igual que los hombres tristes
que por ella son poetas.

Miro atento,
con deseo,
con anhelo en este monte oscuro,
mis plegarias 
a tus haces
em mi rostro son lágrimas,
gotas finas,
diamantadas,
joya vasta de tus deseos...

El abismo entre el deseo
y la magna recompensa,
es cuestión de hipocresía
cuando miras las estrellas.
Vuela alto y toma todas,
roba toda su hermosura,
que tal vez no sean tan frías
como la femenina luna...

Siento ardiente
tus pupilas
suave rojo en las mias,
dejame tomar tu mano,
dejame sentir tu fuerza,
el vigor de la mentira,
seducción de luna llena