17 de diciembre de 2017

Partida cítrica


Antes que te vayas, dejame acariciarte.
Quiero alimentarme, mis labios sabiendo a tí,
antes que te vayas, un antes y un después,
antes recio escarlata, ahora suave Chardonnay

Viendo desangrarte, luce tan poético
Llueve llanto y luces, sobre mi rostro
Toma el lugar que dejaste, el pedestal,
Tonto tótem sin forma, te he de adorar

Llevate mis sonrisas al estar dentro mío.
No dejes nada vivo, ni un recuerdo, ni un respiro.
Aquí tengo viejos sueños, llévalos y desaparece.
Quizá en el otro lado no los rompes, y florecen.

Pero antes que te vayas, dejame acariciarte.
Quiero alimentarme, mis labios sabiendo a tí,
antes que te vayas, un antes y un después,
antes recio escarlata, ahora suave Chardonnay

Al fin siento placer al destruirte, dulzura.
No es tu vida, es mi duda. Son las horas de angustia.
Y es que, en ruinas, tu belleza es como nunca impresionante.
Que cada instante que mueres, me fascina ser tu amante.

Pero antes que te vayas, dejame acariciarte.
Quiero alimentarme, mis labios sabiendo a tí,
antes que te vayas, un antes y un después,
antes recio escarlata, ahora suave Chardonnay

16 de diciembre de 2017

A nadie le importa que no me importe. 
A nadie le importa que no te importe. 
A nadie le importa que otros lloren, que no tengan techo, pan o sueños. 
A nadie le importa que otros crean que tienen un propósito y su felicidad sea irrelevante. 
A nadie le importa trascender. 
A nadie le importa un carajo nada. 
A nadie le importa un cadáver más. Un alma más sin forma ni gracia. El olvido adueñandose de toda mi masa. La diferencia imperceptible entre lo que fuiste y lo que me recuerdas. La laca impenetrable de palabras huecas, a las que alguna vez diste significado. 
A nadie le importan los pulmones deshechos del que tose su vida con sangre y dolores. 
A nadie le importan las lágrimas secas, el sabor a Fierro del esfuerzo fútil. 
A nadie, nadie, un carajo de amor sin esperar la pequeña retribución. 
A nadie,nadie, le importa un carajo 
Pasar de ser persona a ser transacción. 
Que vida tan fácil, tan conveniente. 
A nadie le importa perder la elocuencia. 
Pues sólo se compra. La emoción se compra.
A nadie, nsdie, la cacería, las oportunidades y las risas bobas. 
No extrañas extrañar a tu gente, o al menos, 
Temerle un poquito a la muerte?