Hace mucho que no publico nada ajeno a mí en este espacio. Les comparto mi intento de traducción de esta hermosa pieza.
La carta frente a mí, blanca, vacía,
que aún marca mi ser muy profundo.
Escribo sólo palabras vacías,
nada le importa ya a mi mente.
¿Cuanto me gustaria pedírle
mil palabras para decir?
¿Cuantas veces fuí tonto,
cuántas atraído por este silencio?
Mucho tiempo sin tener un cuento de hadas,
ninguna tierra donde vivan dragones...
Cierra los ojos, estoy muy cerca,
que aún buscaremos los dos esas tierras,
seamos los dos niños cada día,
tan felices, tan libres, sin reclamos,
todos nuestros sueños se entretejen en una sola frase:
Te quiero...