¿Como es que el amor puede ser eterno, si por definicion es tan... efimero?
¿Como es que se puede guardar a alguien en mente y alma por el resto de la eternidad... si la misma eternidad es finita?
Me decia todas estas palabras al oído, mientras seguia bebiendo de mi cuello. Esa pregunta tan... pasional, tan carente de respuesta, una respuesta que buscaba en mis recuerdos, en el calor de mi sangre.
Intenté responder, desde mi alma, pero era tarde. Yo había muerto. Le había dado mi vida, y aunque ahora sonreía, todo había acabado para mi.
Ella abandonó mi cuerpo, tendido en el suelo, quiza donde pertenecía. Salió iluminada bajo la hermosa luna menguante. No pude ver su sonrisa, pero sí su cabello ondulante, acariciando mi último aliento, mientras ambos partimos hacia la libertad.
Para N.